Todos sabemos que el agua es una parte importante de cualquier dieta. Pero, si bien la hidratación es clave para la salud de todos nosotros, es aún más importante cuando se consumen menos carbohidratos. Cada vez más personas están descubriendo la dieta cetogénica, que en pocas palabras es una dieta rica en grasas y baja en carbohidratos con sólidas credenciales científicas.
Los investigadores han descubierto en numerosos estudios diferentes que la dieta cetogénica puede ayudar a perder peso y mejorar la salud general, y esta dieta también se utiliza para combatir algunas enfermedades y afecciones crónicas, como la diabetes, la epilepsia, la enfermedad de Alzheimer y algunas formas de cáncer.
Pero es una dieta relativamente extrema, principalmente porque requiere consumir muy pocos carbohidratos. Uno de los efectos secundarios de una dieta baja en carbohidratos es la deshidratación.
¿Por qué la dieta cetogénica aumenta el riesgo de deshidratación?
Los carbohidratos desempeñan una serie de funciones importantes en el funcionamiento del organismo. Fundamentalmente, los carbohidratos retienen agua y sodio en el cuerpo. En la dieta cetogénica, excretas más sal a través de la sal, en lugar de retenerla en el glucógeno almacenado en los músculos mediante la ingesta de carbohidratos.
Entonces, cuando comes menos carbohidratos, retienes menos sal y menos agua.
Además de tener cuidado de beber suficiente agua, es importante tener en cuenta que una dieta cetogénica implica un menor consumo de sal (eliminando los carbohidratos salados y la mayoría de los alimentos procesados) y una mayor excreción de sal. Por lo tanto, también es necesario incluir mucha sal en la dieta a través de fuentes.
Esto puede ser un desafío, especialmente porque muchos de nosotros tenemos la idea arraigada de que la sal es mala. Sin embargo, es sumamente importante tener suficiente sodio (sal) en el organismo. Necesitamos sal para mantenernos vivos, y un nivel bajo de sodio puede causar debilidad muscular, calambres y fatiga extrema.
Añade sal a tus comidas y, si crees que te estás quedando sin sal, puedes comprar sal o tabletas de electrolitos en la farmacia de tu localidad. Preparar un simple caldo de caldo es una excelente manera de aumentar el sodio y, al mismo tiempo, ¡te hidrata!
¿Qué pasa si te deshidratas?
La deshidratación puede ser desde muy leve hasta muy grave. Existen varios síntomas que son típicos de la deshidratación temprana o leve, y es útil conocerlos para poder detectarla a tiempo:
- Boca seca
- Orina de color oscuro
- Dolor de cabeza
- Sentirse cansado o aturdido
- Latidos cardíacos más rápidos
- Sentirse mareado
- Piel seca
- Rendimiento mental más lento
Los síntomas de una deshidratación más grave son más urgentes e incluyen:
- No sentir la necesidad de orinar en absoluto
- Dolor de cabeza severo
- Respiración rápida y ritmo cardíaco acelerado.
- Ojos hundidos
- Desmayo
Los beneficios de estar hidratado en la dieta cetogénica
Por el contrario, los beneficios de beber suficiente agua mientras sigues la dieta cetogénica generalmente implican ¡sentirse genial!
Estar bien hidratado mejora la concentración y el estado de ánimo, y te proporciona una sensación general de energía y vitalidad. Tu cuerpo se siente más fuerte y más capaz, y tus músculos funcionan de forma óptima.
El agua desempeña un papel fundamental en la pérdida de peso, ya que estimula el metabolismo y evita que confundas la sensación de sed con la de hambre. Por eso, si sigues la dieta cetogénica para perder peso, mantenerte hidratado te dará la mejor posibilidad de lograr tus objetivos.
Debido a la reducción de la fibra de los carbohidratos, muchas personas sufren estreñimiento cuando comienzan la dieta cetogénica. La ingesta de líquidos es vital para prevenir o combatir el estreñimiento, ya que ayuda a mover los desechos a través del tracto digestivo con mayor facilidad.
En general, mantenerse hidratado le ayudará en su camino hacia la dieta cetogénica. Le ayudará a sentirse bien y a adaptarse a los cambios en los alimentos que consume, y le ayudará a aprovechar al máximo su dieta. Además, le ayudará a seguirla durante más tiempo, porque evitará las sensaciones de cansancio, hambre y malestar que a veces se asocian con la deshidratación en la dieta cetogénica.
¿Cuánta agua debes beber?
En realidad, no existe una regla estricta sobre la cantidad de agua que se debe beber en la dieta cetogénica (o en general). Los expertos en salud suelen recomendar beber ocho vasos de 8 onzas por día, pero hasta el momento no existe una justificación científica confiable para esta recomendación.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos sugiere que el adulto promedio debería beber entre 91 y 125 onzas líquidas (es decir, entre 2,7 y 3,7 litros) de aguapor día . Pero otros sostienen que todos necesitamos más que eso, y es posible que necesitemos incluso más en dietas bajas en carbohidratos.
En realidad, cada uno de nosotros es diferente. Nuestros cuerpos consumen energía a un ritmo diferente en función de factores internos y externos: desde nuestra constitución y composición metabólica únicas hasta la cantidad de ejercicio que hacemos, pasando por la temperatura del aire que nos rodea y los contaminantes que respiramos.
Entonces (¡desafortunadamente para aquellos de nosotros a quienes nos gustan los números y los volúmenes para trabajar!), es importante prestar atención a las señales que nos da nuestro cuerpo para determinar si estamos bebiendo suficiente agua.
Tu cuerpo te da señales de que necesitas beber un sorbo (o un trago) de agua. Si experimentas regularmente alguno de los signos de deshidratación mencionados anteriormente, entonces probablemente necesites beber más. Cuando sientas sed, reacciona.
Una regla de oro es intentar que la orina sea de color muy claro en todo momento. Para la mayoría de nosotros, eso significa tener agua a mano para beber sorbos con regularidad y así evitar pasar horas sin beber. Beber poco y con frecuencia, en lugar de beber grandes cantidades solo un par de veces al día, también ayuda a evitar beber demasiada agua .
Te recomendamos que lleves tu botella DLYN contigo a dondequiera que vayas para tener acceso constante a una deliciosa agua alcalina. El agua rica en minerales y antioxidantes, que se agregan instantáneamente al agua cuando llenas tu botella DLYN, es particularmente útil para quienes siguen una dieta cetogénica. Es común tener niveles bajos de magnesio y calcio cuando consumes un plan de alimentación alto en grasas y bajo en carbohidratos, por lo que puedes apoyar tu salud con agua más rica en nutrientes.